lunes, 1 de mayo de 2023

Reseña: El séptimo círculo del infierno de Santiago Posteguillo

Ficha técnica

Título

El séptimo círculo del infierno 

Autor

Santiago Posteguillo

Tipo

Recopilatorio

Editorial

Planeta

Primera edición

2017

Impresión

España

Páginas

214

La obra

Santiago Posteguillo Gómez, originario de Valencia, es un escritor bastante conocido actualmente, a causa de sus, normalmente, voluminosos libros que tienden a centrarse en la Roma antigua. Actualmente el libro más relevante es Roma soy yo, la cual toma como objeto de narración la vida del mítico Julio Cesar. Hasta el momento en que hago esta reseña, no he tenido la oportunidad de leer la obra (pues tiendo a explorar nuevos autores en clubs de lectura), pero creo que la demora acabará. ¿Por qué? Bueno, el autor está tomando tal relevancia entre clubes de lectores, que no solo tiene ya un séquito de seguidores, sino que incluso existen grupos que poco a poco van avanzando en abordar toda la obra de este autor. Algo así como "Los zafonistas"; pueden buscar esto último en un motor de búsqueda como Google o en Instagram.

El libro que traigo a colación de Posteguillo es el tercero de lo que puede comprenderse como un texto especial, ya que no se inserta en el modelo de cuento, poesía o novela. Por ello en la ficha técnica del presente lo clasifico como recopilatorio, aunque también podría llamarse como "libro de referencia" o "estado del arte", ya que funciona como un muy buen punto de partida para explorar nuevos horizontes literarios.

El séptimo círculo del infierno, al menos para el buen lector, no solo hace referencia al título de una de las narraciones de la obra, sino a uno de los nueve círculos del infierno de Dante de La divina comedia, lo cual ya nos hace evocar un paisaje negativo; de sufrimiento y dolor. Al menos desde nuestra idiosincrasia occidental, y no se está tan errado.

La propuesta de este libro es compilar las anécdotas detrás de obras literarias que refieran a algún dolor. A una experiencia que pueda ser comparable, al menos en alguna medida, con el infierno. Esto permite entender como la literatura ha sido perseguida (y aun lo es) por esos contenidos que pueden resultar irritantes o simplemente inaceptables para quienes tienen rabo de paja. Así, encontramos una serie de hechos históricos que permiten comprender dos cosas que pueden darse simultáneamente: la pasión por escribir y la dificultad de que muchos buenos libros vean la luz.

En palabras del mismo autor: "¿Quiénes son los perseguidores de la literatura? Muchos y variados, pero todos con el denominador común de la intolerancia absoluta [...] maestros, como decía, en construir infiernos humanos, a saber: prohibiciones, censuras, guerras, cárceles, vihay olencia de género y campos de exterminio".

Nombrar a todos y cada uno de los autores podría extender de forma innecesaria la presente reseña, pero por nombrar a algunos autores: Safo, Horacio, Rustichello, Madame Pizán, Emilia Serrano de Wilson, Rudyard Kipling, etc. Los anteriormente nombrados están en orden en que aparecen.


Opinión y crítica

Este libro me parece especial en al menos dos aspecto. El primero, te ofrece datos no solo curiosos sino interesantes acerca de la historia de los libros que pueden servir como el simple comentario en una discusión o diálogo amistoso, o lo que realmente debería invocar: una reflexión alrededor de lo que los libros significan en la vida del ser humano. Segundo, como punto de referencia para descubrir autores nuevos o motivar a leer aquellos que están pendientes. Pero incluso podría encontrar un tercer aspecto, y es que como punto re referencia podría servir incluso a los no lectores y que buscan iniciarse en este mundo.

Esto último es especialmente relevante, pues hay que destacar que el libro tiene un lenguaje sencillo. Supremamente asequible sin dejar de lado el aporte histórico. De hecho, casi todos los relatos tienen una estructura similar, donde se nos dan indicios del tema a tratar a partir del título, creando el ambiente con la fecha y el lugar, para revelar en un breve resumen después de la exposición quién es el personaje y el libro en cuestión. Alternativa y ocasionalmente introduce experiencias personales de cómo se relacionó en su vida académica o profesional con el libro y/o el autor tratado.

Me permito nombrar algunos capítulos que me parecieron especialmente interesantes:

Por su puesto, y teniendo en cuenta mis gustos personales, inicio con el primer personaje del libro: Safo de Lesbos. Esta fue una de las poquísimas voces griegas que llegó hasta nuestros días. Fue una poeta que, aunque es figura contemporánea del amor lésbico, ella, según lo que escribió, hablaba del amor en ambos sexos. Fue tan importante en su época que tenía cierta igualdad con el legendario Homero, pues se le nombraba como La poeta, que no es poca cosa:

" - De modo que Platón pensaba que la poetisa Safo era tan buena como las mismísimas musas.

- Eso parece".

Por otro lado me llamó mucho la atención de Imre Kertész. Un hombre de origen húngaro cuyo "...descenso a los infiernos [...] no es de golpe, sino muy progresivo y lento. [...] Vienen más traslados. De Auschwitz a Buchenwald y de allí al campo de Zeitz. Allí recibe una bofetada en la fila. También viene la segunda discriminación: como en el Budapest de su juventud, los judíos también le hacen el vacío porque, al no haber sido practicante efectivo de la religión, lo sienten como si no fuera uno de ellos. No parece importar que sea un prisionero como ellos y que sufra las mismas penurias y privaciones".

Como puede comprenderse a partir del anterior fragmento, Kertész vivió en carne propia los campos de concentración nazi pero, aun peor, se le sumaba el desprecio de ese mismo grupo sometido con el que compartía creencias religiosas. Como se aprecia, el problema surgía por no ser practicante. Realmente no me creo capaz de solo imaginar lo duro de enfrentar el hecho de encontrarse confinado sin saber qué futuro espera, al tiempo que ni siquiera se puede compartir la tragedia con seres que al menos tendrían ese lazo en común.

Kertész, de quien se narra que siempre fue una persona con cierta ingenuidad y que por ello fue conducido a Auschwitz  con engaños, escribió una novela corta y al parecer arto descriptiva y de un tono sencillo y descarnado: Sin destino. Pero al momento en que quería publicarlo, en principio se lo negaron. ¿La razón? Era un libro antisemita.

Quisiera dejar hasta aquí los relatos, al menos en cuanto a la perspectiva favorable de El séptimo círculo de infierno, porque si bien podemos encontrar un montón de historias interesante y hasta graciosas (como la de Gabriel García Márquez), no toda la obra es satisfactoria.

Desde un principio se los expone la idea del infierno que tuvieron que pasar autores con sus obras; objetivo que se diluye en un par de ocasiones, haciendo que como lector se sienta un desvío extraño de la serie de acontecimientos que hilados. Un ejemplo de ello es un relato sobre Shakespeare y una representación contemporánea de una de sus obras y cuya características se reprodujeron en posteriores adaptaciones. Si bien se hace interesante sin duda alguna, el infierno desapareció del rastro en ese momento.

A esto se debe añadir la autopublicidad que se hace el autor. ¿Está mal? Claro que no. Pero no deja de ser innecesario para la talla de su popularidad. Esto es especialmente evidente en un relato que tiene dentro de sus líneas argumentales el seudónimo.

Para terminar, no queda más que hacer una invitación a esta obra por las bondades ya nombradas. El séptimo circulo del infierno, según tengo entendido a partir de su conclusión y del grupo de lectura conjunta en el cual fue leído, tiene dos libros hermanos con la misma temática. Esto me parece especialmente interesante y, en su momento, si llega, les daré su respectiva oportunidad.

No siendo más, y agradecido con todo aquel que me lee.

Jeisson- R31k3

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