Fincha Técnica
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Título
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El violín del diablo
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Autor
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Josep Gelinek
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Editorial
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PLAZA & JANES EDITORES
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Primera edición en
español
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2009
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Impresión
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España
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ISBN
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9788401337154
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El autor
Joseph Gelinek es el seudónimo utilizado por el escritor,
periodista, musicólogo (entre otros) Máximo pradera. De origen español, es un
hombre polifacético de carácter bastante crítico, además de ser un enamorado de
la música. No sólo podemos evidenciar esto último en el presente libro que
reseño, nada más tienes que visitar su twitter para ver su más reciente obra: Tócala otra vez, Bach – Todo lo que
necesitas saber de música para ligar. Eso sin nombrar su primera novela La décima sinfonía.
Forma
En lo personal, describir la forma en que está escrito El violín del diablo es grato, incluso
placentero. En
primer lugar, siendo una obra en español, no tenemos que
reducirnos o preocuparnos por acceder a una obra con buena traducción o
interpretación. En segundo lugar, se resalta el empeño en la construcción de
personajes.
No entra en materia rápidamente acerca del exabrupto del cual
tratará la novela, no; recurre a una lenta pero interesante caracterización de
aquellos que participan a lo largo del texto. Tercero, y aun más evidente, plasma
con gran pasión y precisión los datos recurrentes en las conversaciones de los
personajes, tanto de las obras, autores, fechas, lugares, etc. Como los datos y
acontecimientos que son necesarios para el desarrollo de la trama. A grandes
rasgos, una obra de corte realista e histórica, que mezcla bastante bien las
leyendas que rondan la música clásica con ese toque de fantasía que la hace aun
más atractiva.
Personajes
Raúl Perdomo: será el policía que haga el seguimiento más
apasionado de la investigación del asesinato el cual es el objeto central del
libro. Viudo, vive con su hijo, un pequeño que se está poco a poco formando en
el mundo de la música clásica. Este cándido pero decidido hombre tiene dividida
su vida entre la crianza de su pequeño y su trabajo investigativo.
Gregorio Perdomo: es el hijo de Raúl Perdomo. Es un chico
inquieto y pragmático. A pesar de que su padre está constantemente preocupado
en como se desenvuelve a causa de la pérdida de su madre, el chico en realidad
es más fuerte de lo que su padre cree.
Ane Larrazábal: violinista profesional, es una mujer de un
carácter fuerte y una imagen imponente. Es retratada como un verdadero genio de
la música, y será ella aquel personaje asesinado del cual se desprende la trama
del libro.
Andrea Rescaglio: músico, específicamente del chelo, es el
prometido de Ane Larrazábal. Es de los personajes que más afecta la muerte de
Ane, por obvias razones, además de estrechar una relación cercana con Gregorio
y Raúl durante la investigación del asesinato de su prometida.
Georgy Roskpof, quien lleva la tuba, y Elena Calderón, el
trombón: son músicos que estaban el mismo día de la interpretación y asesinato
de Ane. Esta última logra un vínculo fuerte con Raúl Perdomo, generando una
tensión y una historia más allá del espacio meramente profesional.
Milagros Ordoñez: tal vez el personaje más paradigmático del
libro. En ella se ve la convergencia de la mística del libro y quien refuerza
la leyenda del mismo. Una psicóloga infantil que se ve envuelta de forma
indirecta en la investigación llevada a cabo por Perdomo, a causa de una
facultad de tipo suprasensorial.
Argumento
Raúl Perdomo, un policía viudo y con un hijo, con el afán de
estrechar lazos con este último, lo lleva a una presentación, si no es que el
hijo lleva al padre, de música clásica. En dicho evento estará presente el
ídolo del pequeño Gregorio: Ane Larrazábal. Sin embargo, la felicidad de dicho
evento duró muy poco. Después de la primera parte del evento, en que Ane hacía
su presentación, se detiene la presentación y se solicita de los servicios de
un policía o una autoridad; a este llamado responde Perdomo quien es informado
que Ane Larrazábal, la genio, ha sido asesinada. Así comienza el misterio del
asesinato de esta artista, además de la pérdida de su Stradivarius. ¿Fue
asesinada para robarle su valioso violín con cabeza de demonio o, acaso, la
pérdida de este fue una excusa? ¿Quién está detrás de dicho asesinato? y, más
aún, ¿por qué después de tan grandiosa presentación?
Así comienza la trama central del texto. Perdomo encabezará
la investigación del asesinato de la violinista no sin obstáculos de toda
índole y recurrirá a toda opción posible, incluso inauditas elecciones, con tal
de dar captura al culpable. Se verá involucrado con la leyenda de un violín
maldito, donde todo aquel que tenga una relación con el mismo termina muerto;
se envolverá en un pequeño romance sin dejar de lado su importante labor.
Se introducirá poco a poco en el mundo de la música reforzando así la relación
con su hijo, como entendiendo los motivos del asesino para ultimar la vida de
tan gran artista.
Crítica y opinión personal
La virtud que más resaltaría del libro es la creación de los
personajes. Pradera no se apresura por mostrar el asesinato que será la
centralidad del texto; se toma su tiempo en erigir la personalidad y las
relaciones que nuestros protagonistas tienen. Retrata así a un Perdomo
comprometido con sus trabajos, un hombre honesto y que trata constantemente en
buscar el equilibrio entre su familia (su hijo) y su trabajo. Un hombre que se
mueve en la honestidad, pues no le interesa realmente resaltar, y el deber de
hacer pequeños sacrificios para lograr sus objetivos.
Nos retrata a una Ane Larrazábal fuerte y vigorosa. Una
mujer que no se amedrenta ante nada y que ha luchado mucho para lograr sus
objetivos. Ese carácter fuerte que demuestra que sus éxitos como una genio es
más un mito que una comprensión de una mujer, que si bien tenía facultades para
la música desde pequeña, tuvo una educación temprana en la música que fortaleció con su
constancia y pasión.
El autor humaniza constantemente sus personajes dándoles,
con el mayor énfasis posible, ese realismo y naturalidad que pocos textos
ofrecen. Cuando lo leas, realmente te convencerás (en su mayoría) de sus
convicciones y problemas, de sus deseos y desdichas. También el ambiente es
bien expuesto, interviene de forma correcta en el comportamiento de cada uno.
La ciudad, los escenarios, los eventos y los lugares son ricamente recreados en
relación con lo expresado y vivido. Sin embargo no todo es miel sobre hojuelas.
A este libro le doy un 8 sobre 10. Te preguntarás amigo mío,
si he escrito tan bellos elogios sobre este texto ¿por qué un 8 y no un 10? El
texto falla en una sola cosa, o así lo he percibido, que es crucial en un texto
que trata de un crimen: la motivación del asesino.
Sin pecar de adelantos que dañarían tu experiencia como
lector, afirmaré, que se queda flojo, como lo escribí anteriormente, en el por
qué el asesino decide acabar con la vida de Larrazábal. El asesino, como se
puede intuir desde un principio por la estructura de las relaciones de los personajes
(y esto no es un adelanto innecesario), es cercano a la violinista. Así, de
esta manera, la implacable personalidad que le es atribuida a la artista, no
convence, en última instancia, con las razones por las cuales el criminal
decide concluir con su vida. Parece, más bien, un acto a partir de razones
egoístas o, en general, razones apresuradas a la realidad de la artista, pues,
ella igualmente “iba a morir”.
El libro es atrapante y te da un gran marco histórico sobre
la música lleno de datos interesantes. Te convence poco a poco que ese violín
está maldito y que todo aquél que tenga relación con el seguramente morirá. Una
novela que mezcla de forma convincente el misterio policiaco con la leyenda, la
historia y la mística. Cien por cien recomendado.
Con gusto,
su servidor, Reike.
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