Ficha técnica |
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Título |
Orgullo y Prejuicio |
Autor |
Jane Austen |
Editorial |
Penguin Clasicos |
Primera edición |
2015 |
Impresión |
España |
ISBN |
9788491051329 |
Retomo mi blog (después de tres años...) con esta reseña de uno de los libros del 2020
que leí en una lectura conjunta. El video ya está subido a mi canal, el cual
podrás encontrar en mis redes, y que espero poner al día en concordancia con el
mismo. Esta reseña escrita, aviso, es en gran medida igual a la publicada en mi
canal, pero con más comentarios. Es decir, una versión extendida. Por último,
no está demás, advertir que esta reseña trae spoilers, además de una crítica. No siendo más, continúo.
Pero a ver, ¿de qué va la novela? Para entender mejor la
historia de la novela tenemos que tener en cuenta que, en general, tenemos dos
grupos de personas. Por un lado la familia Bennet, conformada por los padres,
el señor y la señora Bennet; y sus hijas, por orden descendente: Jane,
Elizabeth, Mary, Catherine y Lydia. De este lado nuestra protagonista principal
será la segunda hija: Elizabeth. El otro grupo de personas está conformado por
la familia Bingley y compañía. Es decir, Charles y Caroline Bingley, que son
hermanos, y el mejor amigo de Charles, nuestro protagonista, Fitzwilliam Darcy.
En síntesis, tendremos un romance principal que será el de
Elizabeth Bennet con Fitzwilliam Darcy, y uno secundario entre Jane Bennet con
Charles Bingley.
La historia inicia con la señora Bennet y de cómo esta está enterada de la llegada de un soltero de buenos ingresos económicos; es decir, el señor Bingley. La señora Bennet funciona solamente como una casadera, ya que ve en el matrimonio la única forma de que sus hijas prosperen. Según su razonamiento, el cual es realmente certero para la época, en total son seis mujeres dependientes económicamente de un solo hombre, y en el momento en que este falte, no tendrán como sobrevivir. En ese sentido desea presentar a sus hijas, en una fiesta formal y pública, apostando a que el señor Bingleyse interese por al menos una de ellas.
A la fiesta no solamente asistirá el señor Bennet, sino que entre
otras, irá con su mejor amigo el señor Fitzwilliam Darcy; otro adinerado
caballero. Aquí encontramos el primer contacto, y uno bastante fuerte, al menos
para los protagonistas. Por un lado, Bingley queda presuntamente interesado en
Jane Bennet, pues la invita a su casa. Oportunidad que tomará la madre porque
Jane, afortunadamente para su madre, enfermará
siendo huésped. Por otro, Darcy en aquella reunión será percibido como
un hombre orgulloso que ve por encima del hombre a cualquiera. De hecho, el
meollo del asunto radica en que este despreciará a Elizabeth al momento del
baile, iniciativa dada por un tercero, en principio porque explica, no se
relaciona con cualquiera si no le tiene confianza, sino porque le parece
físicamente desagradable; es decir, le dijo fea.
Desde allí se desenvolverán los sucesos, los cuales se
centrarán en cómo estos personajes se acercan y se alejan, dependiendo de las
características de cada uno descritos en el título de la obra. Es decir: Darcy
como orgulloso y Elizabeth como prejuiciosa.
Tendremos, por supuesto, una cantidad considerable de
personajes secundarios que entrarán en relación con nuestros principales que
añadirán aquellos elementos para construir el camino al final feliz.
Ahora bien, mi apreciación.
Si bien orgullo y prejuicio es considerado un clásico que se ubica entre del siglo XVIII y XIX, lo que la clasifica dentro del grupo llamado de época. Personalmente me parece un mal clásico. Pero no algo malo en toda la extensión de la palabra, porque hay que entender que hay diferente tipos de clásicos, sino en el sentido de que si bien la novela en sí misma no es mala, no envejece de la mejor manera. Me explico.
La trama no deja de ser un tipo de empoderamiento de la mujer
para decidir sobre su futuro. Pues, con independencia de con quien se case,
ella podrá hacerlo guiada por el amor verdadero. Sin embargo, esta necesidad
era importante en ese momento, en esa época. Cosa que no lo es tanto en pleno
siglo XXI, en donde las culturas occidentales es más que claro que para casarse
debe existir amor de por medio.
Por otro lado, las adaptaciones no han hecho más que inflar
de forma desmedida la precepción del libro. ¿Qué una mujer puede decidir con
quien se casa? Sí. ¿Qué todos merecen un final feliz? Pues también. Pero, ¿Qué
puede existir un hombre con un montón de dinero, tímido, pragmático y
altruista, puro, sexualmente y emocionalmente hablando? Pues no, o es poco
probable. Así es que nuestro protagonista, el señor Darcy, es retratado en la
gran pantalla como un hombre tímido, y que no conocer, o mejor, no ha probado
ninguno de los vicios, y queda en un ideal endiosado, y no solo en la
Inglaterra del siglo XIX, sino ahora mismo.
Esto es realmente una tragedia, hablando de manera cómica,
respecto al libro. Pues en este, nuestro protagonista es un hombre que hace las
cosas por deber; porque es lo correcto, o así lo considera. Analiza las cosas
de la manera más fría posible, y si existe un evento que lo perturba, prefiere
retirarse para hacer un análisis con los ánimos calmos. No es un incompetente
al hablar, solo que lo hace de manera tan sincera que choca con la hipocresía,
o con lo normalmente aceptado.
Por otra parte, la coherencia de la descripción de nuestra
protagonista, y refiriéndome directamente al libro, no es demasiado coherente.
Desde un principio se percibe una personalidad protectora sobre la personalidad
apacible y calma de su hermana Jane. Al tiempo se le describe como una mujer
analítica, la cual gusta de analizar a fondo a las personas y las situaciones.
Descripción que es borrada de un brochazo, al menos parcialmente, porque
realmente profundiza y sospecha todo lo que no debe analizar y sospechar. No
duda un segundo de un hombre llamado George Wickham, el cual habla de manera
negativa de su experiencia con Darcy, pero sí cuando alguien tiene sospechas de
él.
Tampoco le da el voto de la duda o la comprensión a la manera de actuar de Darcy. Simplemente apela a aquella primera impresión negativa, terminando por juzgar a dicho personaje. Tal es la grandeza de sus prejuicios, solo hacia Darcy, que termina por dudar de absolutamente toda acción buena que este pueda tener casi hasta el final del libro.
Cerraré esta reseña con dos puntos que siguen reforzando el
problema de este libro. La primera, este texto solo retrata la realidad
burguesa. En otras palabras, de las personas adineradas. Tanto es así, que
todos los problemas, sociales y de reputación, desde la percepción de la señora
Bennet hacia Darcy, como de cierto personaje embaucador, se soluciona con
dinero. Si este elemento material no estuviera de por medio, la novela habría
sido una cosa totalmente diferente. De hecho, esto es lo que me parece, queda,
incluso, muy bien planteado en las adaptación cinematográfica y la serie. Si no
existiera un par de hombres adinerados y cuasi perfectos, simplemente la señora
Bennet siquiera habría pensado en la fiesta. Sin este elemento, el libro no
funciona.
Segundo, la situación perfecta incluye dos elementos, amor y
dinero. Si falta uno de los dos, la boda es incluso reprochable. Mal vista. Tal
es así, que aquellas personas que se quieren casar solo para asegurarse no
morir de hambre en el futuro, se considera un mal actuar.
Esto aparece en el caso de nuestra protagonista Elizabeth en
relación a su llamada mejor amiga: Charlotte Lucas. Esta última decide cazarse
por conveniencia. No ama realmente al hombre que eligió, sino porque carece de
los recursos para llevar una vida realmente sostenible. Aun así, Elizabeth, el
personaje que no solo es descrito como analítico, sino mejor amiga de
Charlotte, termina por despreciarla (sin decirlo abiertamente) y verla con
otros ojos, al punto de romper implícitamente la amistad. Doble golpe negativo
para esta mujer empoderada.
¿Acaso el tema no era respetar la decisión de la mujer de con
quién decidía pasar su vida, con independencia de ser juzgada? No. Lo que
importa a Elizabeth es el amor por amor. Pero dadas las condiciones de la
novela, el amor sin dinero no es factible. Al menos en ninguno de los
personajes, pues, evito el spoiler lo
más posible, lo que hace una de sus hermanas es totalmente despreciable, así
aunque lo haga por amor. Tal vez adolescente e impulsivo, pero igual es amor.
En fin. Un libro que para nada recomiendo si de entrada estás
influido por un Darcy que, para mí, está caricaturizado en la película.
Plasmado como un hombre que va de lo tímido a lo simplemente tonto. Mejor,
recomendaría con toda seguridad este texto
si, en primer lugar, quieres algo entretenido y romántico que
tendrá un final feliz. Algo poco
profundo y de lectura fácil. En segundo lugar, si se es estudiante, o
simplemente se está interesado por entender cómo se plasma los problemas de la mujer
de la sociedad burguesa de la época. Por último, más que recomiendo, sino que
será de obligación, para el estudiante de literatura inglesa.
No siendo más, espero, querido lector, te sirva esta reseña.
Con especial cariño, R31k3.
Video reseña en Youtube
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