Ficha técnica
|
|
Título
|
La rebelión de la
granja
|
Autor
|
George Orwell
|
Editorial
|
Ediciones destino
|
Primera edición
|
1973
|
Impresión
|
España
|
Depósito legal
|
B – 26363 - 1978
|
Argumento
Unos animales de granja, llevados por
las ideas de libertad de un viejo cerdo ya muerto, deciden tomar cartas en el
asunto y se revolucionan contra los dueños de la granja.
Liderados por los cerdos, pues se
considera que estos son los animales más inteligentes y por tanto quienes
pueden dirigirlos correctamente, expulsan a los humanos y se volverán amos y
señores de esas tierras. Su dominio se reflejará en el cambio del nombre de la
granja, de granja Manor a granja Animal.
Personajes:
Señor Jones: el dueño de la granja, es
un hombre descuidado y falto de carácter en cuanto a la forma en que debe no
solo tratar a los animales, sino también a sus relaciones interpersonales.
Mayor: un viejo cerdo que algún tiempo
antes de su muerte, deja las enseñanzas y la ideología de los animales libres
del jugo humano. Es aquella semilla de ideales que guiarán a la revolución
animal.
Napoleón: el cerdo que toma la mayor
parte de la administración de la granja. Es un animal que poco a poco y a lo
largo de toda la novela, mostrará sus verdaderos intereses sobre los demás
animales y los granjeros vecinos.
Squealer: es el cerdo mano derecha de
Napoleón. Sirve como intermediario además de hacer valer las decisiones de
Napoleón ante los animales.
Snowball: amigo de Napoleón y uno de los
líderes de la revolución. Se caracteriza por su personalidad amable y siempre
positiva. Siempre tiene la cabeza en proyectos para mejorar la calidad de vida
de los animales.
Moses: un cuervo amaestrado que se
muestra renuente a las actividades de los animales. Siempre habla sobre un
país: el Monte de azúcar. Un paraíso celestial más allá de las nubes.
Boxer: el caballo más fuerte de la
granja. Es un animal dedicado cien por ciento a su trabajo, tanto que su lema
es “trabajaré más fuerte”.
Mollie: una yegua que se muestra poco
interesada y diligente por la revolución en la granja animal.
Benjamin: un burro que tiene una actitud
pasiva igual antes como después de la revolución. Siempre tiene una perspectiva
escéptica acerca de las bondades de la revolución.
La gata: es uno de los personajes más
renuentes. Aparece y desaparece según la conveniencia del momento.
Ovejas y gallinas: son los animales que
menos tiene una participación activa en la granja. Su actividad se reduce a
obedecer ciegamente las decisiones de Napoleón.
Los perros: hijos de las dos hembras
caninas, Jessie y Bluebell, fueron utilizados por Napoleón como sus
protectores.
Apreciación personal y crítica
En la edición que tuve la oportunidad de
leer, amigo lector, se encontraba también una introducción dada por el mismo
autor. En dicha introducción se reflejaba los inconvenientes que tuvo para que
esta obra viera la luz. Es así que la diatriba va en contra de los periodistas
y su autocensura. Es allí, en esa crítica, en donde podemos apreciar la esencia
misma del presente texto, la intención real de una sátira disfrazada de un
sencillo cuento.
Los editores aconsejaban no sacar el
libro ya que en ese momento los ingleses tenía por aliado a los rusos, y una
crítica tan fuerte en donde Stalin era retratado con el mismo Napoleón y sus
decisiones dictatoriales, podía acarrear problemas.
La rebelión de la granja revela la
perspectiva que tenía Orwell respecto a la traición y dictadura que se ejercía
por Josef Stalin. La estrategia baja de revolucionarse en vistas de una mejor
vida, pero que poco a poco se transforma es una existencia miserable y de
esclavitud. También plasma las estrategias que llevan a que la mayoría de la
población se vuelva conforme y se tolere los insufribles castigos; por no
nombrar a aquellos que siguen ciegamente cualquier decisión de los líderes así
los perjudique de alguna manera.
Realmente encontré, como lector, un
texto corto pero que me llenaba de emociones diversas; desde amor y odio por
algunos personajes, como angustia por el futuro de los animales que colocaban
sus esperanzas y se daban apoyo unos a otros para lograr algún mínimo de
bienestar.
Por este tipo de textos es que los
lectores, sean nuevos o viejas vacas sagradas de los libros, tienen que
reconocer que no importa en absoluto la extensión de la obra, sino el contenido
de esta. Claro, está la dificultad en la presente acerca de la correcta
interpretación de los personajes, pero, a la larga, el contenido se mantiene
intacto. Así pues, entendemos los planes que siempre rondaron en la cabeza de
Napoleón, la injusticia que se cierne sobre los animales y, claro está, qué es
lo que realmente se traían entre manos la mayoría de los cerdos.
La obra se hizo para atacar un régimen
establecido, pero es posible aplicar la perspectiva que nos muestra a otras
sociedades. No es de entrada un retrato del comunismo, sería más claro ver como
algunos rasgos de los líderes injustos se reproducen en las disposiciones que
toman respecto a sus pueblos.
Recomiendo totalmente la obra si no has
leído nada de Orwell y quieres aproximarte al autor, como si apenas te acercas
a este tipo de textos de corte político. Incluso se puede afirmar que, como
texto, es un buen inicio para cualquier persona al universo de la literatura.
Su servidor R31K3
No hay comentarios.:
Publicar un comentario